Trabajadores de Mariscos D’Agustín denuncian impagos y abandono por parte de la empresa
Empleados llevan cinco meses sin cobrar y exigen una solución inmediata ante la falta de respuestas de la dirección
GETAFE/06 MARZO 2025.- La situación en la empresa Mariscos D’Agustín, ubicada en el polígono frente al Cerro de los Ángeles, es insostenible. Así lo han denunciado sus trabajadores a Canal Getafense Televisión Radio, quienes afirman llevar cinco meses sin percibir su salario y tres sin actividad laboral efectiva. A pesar de ello, la dirección les obliga a acudir diariamente a su puesto de trabajo, sin tareas asignadas y en condiciones cada vez más precarias.
Carlos Armendariz, responsable de calidad de la empresa, y Pablo, trabajador del muelle, han relatado el malestar que vive la plantilla. «No tenemos ninguna actividad, pero estamos obligados a venir. Psicológicamente estamos agotados y económicamente arruinados», declararon. La falta de pago afecta ya a ocho nóminas y tres pagas extraordinarias, lo que ha llevado a muchos empleados a depender de sus familias y ahorros para sobrevivir.
La situación se agrava con la retirada de servicios esenciales. Los empleados han denunciado que la empresa ha dejado de pagar el suministro de agua, obligándolos a llevar garrafas para poder beber y mantener una mínima higiene. Además, se ha suprimido el servicio de limpieza, lo que obliga a los propios trabajadores a encargarse de la higiene del lugar con recursos propios.
Los trabajadores aseguran que la dirección, conformada por tres hermanos, no da la cara y que las pocas explicaciones que han recibido apuntan a un Expediente de Regulación de Empleo (ERE) que nunca llega a concretarse. «Lo único que pedimos es una solución digna y la posibilidad de acceder al paro para buscar otro empleo», explicaron.
Ante esta situación, la plantilla ha optado por la vía legal. Han demandado a la empresa por incumplimiento de contrato y han acudido a conciliación, aunque sin éxito. Ahora esperan los juicios, cuyos plazos se extienden desde mayo hasta marzo del próximo año. «No podemos aguantar en esta situación hasta entonces», lamentan.
Además de los empleados, los proveedores también se han visto afectados por impagos, lo que ha derivado en que algunos acudan a la empresa para exigir lo que se les debe.
«Solo queremos cobrar por nuestro trabajo y poder mantener a nuestras familias. Hay compañeros que dependen únicamente de este sueldo y están en una situación desesperada», denuncian. Mientras tanto, la dirección sigue sin ofrecer una salida clara a esta crisis, dejando a 42 trabajadores en una situación límite.