El Orden del Capital: Cómo los Economistas Inventaron la Austeridad y Allanaron el Camino al Fascismo

Una mirada profunda a los orígenes y efectos de la austeridad en el capitalismo moderno, según Clara E. Mattei

GETAFE/10 MARZO 2025.- En tiempos de crisis financiera, las políticas de austeridad se han consolidado como una estrategia recurrente de los gobiernos para hacer frente a los déficits y lograr la solvencia fiscal. Recortes salariales, reducción del gasto público y eliminación de beneficios sociales se han presentado como soluciones necesarias para sanear las economías. Sin embargo, ¿es la austeridad realmente una respuesta legítima a los problemas económicos, o se trata de una herramienta de control social que favorece a las élites? La economista política Clara E. Mattei, en su obra El orden del capital, ofrece una visión crítica y reveladora sobre los orígenes y el impacto de estas políticas.

Los orígenes intelectuales de la austeridad: un control sobre las clases trabajadoras

Mattei no se limita a analizar la austeridad como una mera respuesta económica a las crisis, sino que profundiza en su génesis intelectual. A través de una exhaustiva investigación histórica, rastrea las raíces de la austeridad hasta el periodo de entreguerras en la Gran Bretaña y la Italia fascista. En este contexto, la austeridad no surgió como una necesidad para asegurar el equilibrio fiscal, sino como una estrategia diseñada por y para las élites económicas con el fin de contener el creciente poder de la clase trabajadora tras la Primera Guerra Mundial.

Con el auge del movimiento obrero y las amenazas de revueltas sociales, los gobiernos de estos países decidieron aplicar políticas que beneficiaban principalmente a los propietarios y empresarios, mientras imponían un férreo control sobre los trabajadores. A través de la figura del economista tecnócrata, como el caso de Alberto De Stefani en Italia, la austeridad fue presentada como una medida de estabilidad fiscal, pero en realidad, su objetivo era mantener el orden social y económico, preservar las jerarquías y frenar las demandas de cambio.

Austeridad y fascismo: el caldo de cultivo para el autoritarismo

El análisis de Mattei no se limita a los aspectos económicos, sino que también establece una conexión directa entre las políticas de austeridad y el ascenso de regímenes autoritarios. En Italia, por ejemplo, las políticas de austeridad sirvieron de caldo de cultivo para la emergencia del fascismo bajo Benito Mussolini. En este sentido, la austeridad no solo empobreció a las clases populares, sino que también generó el caos social necesario para justificar la instauración de un régimen autoritario que pudiera restaurar el orden.

Mattei muestra cómo las medidas de austeridad han sido consistentemente utilizadas como una herramienta para preservar las jerarquías de poder, creando condiciones de inestabilidad que, paradójicamente, son vistas como necesarias para garantizar la seguridad de las élites económicas. La austeridad, por tanto, no solo refuerza el dominio de unos pocos sobre los muchos, sino que también elimina las posibilidades de una alternativa al capitalismo, al generar una profunda desigualdad social que impide el cuestionamiento del sistema establecido.

La austeridad en tiempos modernos: una repetición de patrones

La autora no se limita a examinar el pasado, sino que también pone en evidencia cómo estos patrones se repiten en tiempos más recientes. La crisis financiera de 2008 y las políticas post-pandemia han demostrado que las soluciones de austeridad siguen siendo aplicadas de manera global. Los efectos son claros: una clase trabajadora debilitada, un aumento de la desigualdad y el fortalecimiento de movimientos autoritarios que se presentan como la única opción viable ante la crisis.

La austeridad, como herramienta para asegurar la estabilidad del capital, ha demostrado ser efectiva para blindar los intereses de las élites, pero a costa del bienestar de la mayoría. Esta estrategia ha generado un ciclo de crisis y recortes que perpetúa el dominio de las élites económicas, a la vez que crea las condiciones para el surgimiento de regímenes autoritarios que se presentan como la respuesta a las “amenazas” que el desorden social y económico representan.

Un análisis crítico y una advertencia para el futuro

Con El orden del capital, Clara E. Mattei no solo ofrece una historia detallada de los orígenes de la austeridad, sino que también plantea una reflexión crucial sobre su futuro. En un momento en que las políticas de austeridad siguen siendo presentadas como la única solución en tiempos de crisis, la autora alerta sobre las consecuencias devastadoras de estas medidas y cuestiona la legitimidad del dogma austeritario.

Mattei nos invita a repensar el modelo económico vigente y a explorar alternativas que prioricen el bienestar colectivo por encima de los intereses del capital. La austeridad, argumenta, nunca fue una necesidad económica; fue una estrategia pensada por y para las élites, cuyo objetivo ha sido siempre el mantenimiento del sistema capitalista y la preservación de un orden social profundamente desigual.

En conclusión, El orden del capital es una obra fundamental para comprender las raíces de la austeridad y su papel en la configuración del capitalismo moderno. A través de un análisis histórico y político, Clara E. Mattei nos ofrece una perspectiva crítica sobre las políticas económicas que han marcado las últimas décadas, invitándonos a reflexionar sobre las verdaderas intenciones detrás de las soluciones que nos proponen para afrontar las crisis.